Cuatro abierto moderno de 2.01 metros de altura formado en la Universidad de USC Upstate (NCAA D1) durante cuatro temporadas antes de debutar como profesional en el presente curso en el Spisska Nova Ves eslovaco. En sus años de formación, destacó sobre todo en las dos últimas temporadas, donde se ganó el puesto de titular y participó con el equipo en el torneo de postemporada del CIT. En su último curso en Estados Unidos, Thompkins alcanzó sus mejores cifras en Universidad, promediando 10.8 puntos por partido, 5.8 rebotes y 1.1 tapones en 31 minutos por partido, todo ello acompañado por un excelente 38% de acierto desde el triple con una media de 2.3 lanzamientos acertados desde la larga distancia. Tras un año en blanco donde su anterior agencia no le encontró nada, pasó a formar parte de Helping Ballers, debutando en la 1ª división eslovaca, donde causó una grata impresión gracias a sus habilidades para el tiro exterior en ataque y la intimidación y rebote en defensa. Tras su temporada de rookie, firmó en Ibiza para jugar la LEB Plata, lugar en el que le costó arrancar debido a una lesión de la que ya está totalmente recuperado.

En su estilo, Thompkins destaca básicamente como un especialista en el tiro exterior, donde suma más del 60% de sus puntos de manera habitual. Ha superado los dos triples de media anotados por partido en su último curso NCAA y lo está repitiendo en Eslovaquia, algo que deja muestra de su rol como ala-pívot especialista tirador. A su tiro exterior, tanto en situaciones abiertas como de pick&pop (donde saca ventaja de una rápida y elevada mecánica de lanzamiento), Thompkins une una interesante capacidad para lanzar sobre bote, tanto en la media distancia como en las cercanías del aro, usando el bote para ir al aro y finalizar en mate en cuanto tiene ocasión. Igualmente, Thompkins corre la transición, otra de sus fuentes principales de anotación, y juega sin problemas por encima del aro, siendo capaz de rematar situaciones de juego en carrera en alley-hoop sin problema. Esta capacidad atlética se hace especialmente destacada en defensa, donde a una buena capacidad de rebote para un jugador de sus características une una excelente capacidad para la intimidación, tanto en situaciones de uno contra uno como de tapón en ayuda. El pasado curso en Eslovaquia se acercó a los dos tapones de media por partido.